En el competitivo mundo del comercio electrónico, la agilidad y la adaptabilidad son esenciales para el éxito. Frente este contexto, las plataformas de desarrollo low-code impulsadas por inteligencia artificial (IA) aportan ventajas prometedoras al comercio electrónico. Al permitir la creación de herramientas digitales mediante interfaces visuales de “arrastrar y soltar”, plantillas prediseñadas y ajustes de configuración ya preparados, el low-code facilita el proceso de diseñar y crear aplicaciones funcionales.
Como estas plataformas son súper intuitivas y cuentan con componentes listos para usar, la codificación real se minimiza. De tal forma permiten que incluso los desarrolladores ciudadanos (es decir, las personas sin formación en desarrollo de software) puedan participar en la creación de la propia herramienta o implementar la automatización del e-commerce. Al ofrecer esta posibilidad estas plataformas democratizan el desarrollo de las tiendas de comercio electrónico. Esto también da lugar a un entorno más colaborativo e inclusivo, donde los usuarios empresariales y los desarrolladores profesionales pueden trabajar juntos sin problemas en proyectos.
El e-commerce es uno de los ámbitos donde las plataformas low-code están ofreciendo soluciones a las empresas, pero también hay muchos otros. Según un estudio de Mordor Intelligence, el tamaño del mercado global de estas plataformas ronda los U$S 16 mil millones en 2024, y alcanzará los U$S 62 mil millones en 2029, creciendo a una tasa compuesta anual de casi 31% durante el período previsto (2024-2029).
Características y ventajas
Las plataformas low-code están equipadas con funciones de automatización del flujo de trabajo. Además, ofrecen conectores prediseñados para fuentes de datos populares, algo fundamental para el caso del e-commerce, ya que los entornos de comercio electrónico manejan grandes volúmenes de datos provenientes de diversas fuentes tecnológicas. Adicionalmente las herramientas de low-code pueden aprovechar los recursos de la nube para ofrecer una implementación escalable de aplicaciones de comercio electrónico en el ambiente cloud con un solo clic.
Las ventajas antedichas abren la posibilidad de acortar el ciclo de entrega de nuevas soluciones de e-commerce, además de reducir los costos de desarrollo. Esto también permite que las empresas reaccionen rápidamente a los cambios en el mercado y a las nuevas tendencias, y obtengan mayor agilidad, un factor clave en el negocio de e-commerce. Por ejemplo, pueden agregar opciones para nuevos productos al instante. Por otra parte, en el caso del low-code la rapidez no va en contra de la solidez y la escalabilidad de los desarrollos.
Al aprovechar estas plataformas, las empresas pueden crear prototipos y lanzar rápidamente productos mínimos viables, iterar y mejorar sus websites y aplicaciones móviles basándose en los comentarios de los usuarios.
Frente a estas ventajas la consultora internacional Gartner anticipó que en 2025 el 70% de las nuevas aplicaciones de todo tipo se crearán con soluciones sin código o con poco código.
Factores de éxito
Es sabido que muchas plataformas de comercio electrónico dependen de la integración de APIs y servicios de terceros para incorporar funcionalidades esenciales como logística de envío, gestión de inventario y pasarelas de pago, por mencionar solo algunas. En este sentido las soluciones de low-code también aportan una ventaja, ya que simplifican el proceso de integración al proporcionar conectores prediseñados y herramientas visuales para conectar sin problemas servicios externos.
Sin embargo, para tener éxito con esta tecnología aplicadaa al e-commerce es fundamental comprender a fondo las necesidades del negocio, centrarse en ofrecer valor a los clientes y poner foco en la UX, de modo tal de poder asegurar a los usuarios experiencias fluidas, amigables y diferenciales.
También hay que decir que el low-code no elimina por completo la codificación, ya que siempre pueden surgir necesidades comerciales que requieran de una lógica personalizada en la aplicación, por lo que siempre conviene trabajar con un socio tecnológico que pueda sacar el máximo provecho al low-code y que, al mismo tiempo, cuente con programadores avezados para que la tienda de ecommerce no tenga límites en cuanto a su despliegue de cara tanto al negocio como a sus clientes.
Entre los ejemplos prácticos puede mencionarse el caso de Shopify, una de las plataformas de comercio electrónico líderes que usa principios de low-code para permitir a las empresas lanzar y escalar sus tiendas en línea. Esta plataforma no se promociona como una herramienta low-code en sí misma, pero ofrece todos los recursos para montar un negocio online en cuestión de horas. Pero es relevante destacar que, aunque el low-code minimiza la necesidad de programar, no la elimina por completo, ya que ciertas necesidades pueden requerir una lógica personalizada en la aplicación. Por eso es que siempre conviene apoyarse en una desarrolladora de software, cuyos talentos puedan crear una tienda aprovechando el potencial del low-code, pero con el valor agregado que aporta la programación a nivel de la personalización, la optimización, la escalabilidad y la seguridad. En Innova Developers, por ejemplo, somos expertos en el desarrollo de soluciones de comercio electrónico centradas en el cliente, ágiles y flexibles, aprovechando las ventajas del low-code y aplicando nuestro expertise en diseño de la experiencia del usuario (UX).
